agosto 05 2020 0Comentario
El Golpe de calor en el trabajo

Golpe de calor en el trabajo. Altas temperaturas

El golpe de calor en el trabajo es algo que, lamentablemente está de actualidad en los últimos tiempos. Sobre todo, a raíz de la reciente noticia sobre la muerte de un trabajador del campo por ese motivo. La fuerte subida de las temperaturas en algunas zonas de España durante los meses de verano, hace que aumente considerablemente el riesgo de daños causados por exposición a temperaturas ambientales extremas.

Son muchos los sectores afectados por este riesgo, y como es sabido, la construcción es uno de ellos. En el presente artículo, hablaremos de cómo prevenir el golpe de calor en el trabajo y otros riesgos derivados de la exposición a altas temperaturas durante la jornada laboral en obra.

Riesgo por golpe de calor

Las altas temperaturas en el ámbito laboral están relacionadas con varias disciplinas preventivas. La principal área que trabaja las consecuencias de dicha exposición es la Higiene Industrial. En ella se estudian los riesgos derivados del medio ambiente de trabajo. El ambiente térmico o condiciones termohigrométricas en las que se puede realizar un trabajo, pueden afectar a la seguridad y salud de un trabajador o trabajadora.

El riesgo por golpe de calor en el trabajo, viene derivado de la exposición a temperaturas ambientales extremas. Los daños causados por las altas temperaturas y el calor extremo pueden ser diversos y aparecen bruscamente. De entre ellos, el peor es el golpe de calor, que puede producir la muerte de la persona afectada. Además, hay que tener en cuenta que ciertas personas afectadas por otras patologías pueden sufrir un golpe de calor.

Causas y síntomas del golpe de calor en el trabajo

Como ya hemos comentado, el ambiente muy caluroso y la humedad ocasionan el golpe de calor en el trabajo. No obstante, el esfuerzo físico muy intenso en ambientes no extremos, sino moderadamente cálidos, también pueden provocar el golpe de calor. Habitualmente, en el sector de la construcción se dan las dos situaciones.

Algunas tareas habituales de la construcción, como el fraguado del hormigón, extendido de aglomerado, etc. generan exposición a calor y humedad ambiental que se unen a las situaciones ambientales derivadas del propio clima y que ya hemos comentado. Esto ocasiona un incremento notable del nivel de riesgo de golpe de calor en obra.

Los síntomas habituales del golpe de calor en el trabajo son temperatura corporal muy alta, piel seca y caliente, cese o disminución de la sudoración, convulsiones, delirio, confusión mental, etc.

Otros riesgos derivados de las altas temperaturas

Ya hemos comentado que las temperaturas extremas son causantes de numerosos daños aparte del golpe de calor. Así pues, no debemos olvidar que dichas condiciones son capaces de provocar otros efectos patológicos como sarpullidos, deshidratación, calambres, agotamiento o síncope. Asimismo, las situaciones de estrés térmico agudo puede incrementar el nivel de riesgo psicosocial, ya que pueden ocasionar pérdida de control emocional, explosiones de ira o llanto prolongado.

Aun cuando las condiciones no sean extremas, es decir, aunque no haga mucho calor, dichas altas temperaturas influyen en el desarrollo y la calidad del trabajo y por tanto en el rendimiento laboral. Dentro del ámbito de la ergonomía, como ya vimos en nuestro artículo sobre la ergonomía en la construcción, influye seriamente el disconfort termohigrométrico y condiciones ambientales inadecuadas. Causadas por … situaciones de riesgo por exposición al calor.

Medidas para prevenir el golpe de calor en la construcción

Para prevenir el golpe de calor y otros riesgos derivados de las temperaturas altas, serán fundamentales todas aquellas acciones que ayuden a mantener la temperatura del cuerpo ante los aportes extra de calor. Facilitar los mecanismos naturales de termorregulación, así como determinados comportamientos y pautas favorecerán dicho cometido.

Uno de esos mecanismos de termorregulación de naturaleza fisiológica es la sudoración, ya que la evaporación del sudor produce una importante pérdida de calor. Es por ello, muy importante beber mucha agua para evitar la deshidratación.

Las medidas relacionadas con el comportamiento que pueden ayudar a la termorregulación pasarían por la adaptación de los puestos de trabajo. Para ello se deberían incluir pautas como descanso periódicos o disminución de la actividad. También intentar ubicar las tareas en sitios frescos y ventilados. Si es necesario trabajar en exteriores conviene comenzar a trabajar temprano y evitar las horas centrales del día o de calor más intenso. Se debe adecuar el tipo y la cantidad de ropa. En este sentido, es necesario usar elementos de protección individual adecuados, sombreros, ropa transpirable, etc.

Ante un golpe de calor en el trabajo, es necesario proporcionar asistencia médica inmediata, ya que como hemos comentado puede provocar la muerte. Se debe mojar a la persona con líquidos fríos, abanicarla para favorecer la evaporación y favorecer el enfriamiento.

Para cualquier asesoramiento en materia de seguridad y salud en la construcción o temas relacionados con la coordinación de seguridad y salud, no dude en consultarnos. GespreObra también ofrece servicios de peritaje, elaboración de estudios y planes de seguridad y salud y consultoría en materia de prevención de riesgos laborales en la construcción industria y minería.

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